sábado, 16 de diciembre de 2017

ENCEFALITIS EQUINA VENEZOLANA





Resultado de imagen para encefalitis equina venezolanaEs una enfermedad zoonótica de origen viral producida por el virus del mismo nombre, (EEVV, miembro de la Familia Togaviridae, Género Alphavirus). El virus fue aislado por primera vez por Kubes y Ríos en caballos, durante una epizootia en Venezuela, en 1938; el virus no fue asociado a enfermedad humana hasta muchos años después. La investigación de la ecología del arbovirus en América tropical durante los tres decenios pasados, ha dado por resultado la identificación de numerosos subtipos antigénicos del virus de la VEE, que difieren en patogenicidad para equinos y posiblemente para humanos y con ciclos de mantenimiento y transmisión distintos. Tomados en conjunto, los virus de la VEE han matado más equinos y producido más enfermedades humanas en el hemisferio occidental que cualquiera otro arbovirus. Es transmitidas por mosquitos (vectores), de amplia distribución geográfica, capaces de producir epidemias caracterizadas por el desarrollo de síndromes neurológicos al causar meningo - encefalomielitis en los équidos (equinos, asnales y mulares) y humanos afectados, con grados variables de morbilidad y letalidad. Es exclusiva del Continente Americano. Se distribuye principalmente en Centro América, Colombia, Ecuador, México, Perú, Trinidad, Venezuela.2

Virus Encefalitis Equina Venezolana:
El virus de la EEV ha sido incluido dentro del grupo (A) de los arbovirus o togavirus . Es un virus peligroso de trabajar en el laboratorio debido a la facilidad con que los seres humanos pueden contraer la infección. Sin embargo, la vacunación del personal y usando medidas de seguridad y las precauciones adecuadas es posible manipular el microorganismo reduciendo los riesgos a un mínimo.

Resultado de imagen para encefalitis equina venezolana VIRUS1. Propiedades físicas y químicas. El virus posee una cápside, de probable simetría de icosaedro; rodeada de una membrana. Cuando se observa la superficie del virión al microscopio electrónico, ésta presenta una superficie de apariencia difusa y de proyecciones muy finas . El tamaño de los viriones ha sido estimado al microscopio electrónico entre 65 y 75 nanómetros . Estructuralmente el virus está formado por un genoma de ácido ribonucleico (ARN) de cadena sencilla. Además posee 3 polipéptidos, uno con alto contenido en lisina, asociado con el ARN y otros dos, que son glicoproteínas y que junto con los lípidos estructurales forman la membrana viral . Por otro lado, la hemaglutinina es un componente inmunogénico en la superficie del virión y probablemente corresponden a las proyecciones de glicoproteína. En lo que respecta a la relación de proteína: lípido: ARN ésta es de 70: 24: 6. El virus se inactiva con desoxicolato de sodio 1: 1000 y con éter indicando que posee lípidos esenciales. También se inactiva parcialmente con formalina, es sensible al ácido y se inactiva rápidamente a 37° C .

2. Sistemas de cultivo y huéspedes susceptibles. El ratón lactante suizo blanco es bastante sensible a la infección cuando el virus se inocula por vía intracerebral, subcutánea o intraperitoneal. En estos animales se presenta una infección fatal en 24 a 48 horas. Por otra parte, el ratón de 3 semanas de edad es menos susceptible que el ratón lactante. El virus también es capaz de multiplicarse en gran variedad de animales tales como: los cobayos, hamsters, pollos de un día de nacidos, monos Macaca mulata, perros y algunas aves. Entre los cultivos celulares en los que el virus puede multiplicarse se encuentran las células de útero humano y canino, HeLa, renales de hamsters (BHK), hepáticas de "Chang", "L", conjuntivales, renales de mono, embrionarios de pollo, pulmonares de embrión de ratón, embrionarios de cobayo, “Mahen" y corazón de cobayo.

3. Multiplicación viral. El virión se adsorbe a la superficie celular y penetra al citoplasma por el proceso de viropexis. El ARN viral es liberado e induce la síntesis de proteína y ARN. En el citoplasma y ocasionalmente en el núcleo, se forman viroplastos en donde el ARN y las proteínas forman los nucleoides. Éstos generalmente se localizan alrededor de vacuolas citoplásmicas cerca de acumulaciones de polirribosomas y mitocondrias. Por medio de anticuerpos fluorescentes se ha podido demostrar la presencia de los antígenos virales en el citoplasma de las células 4 o 5 horas después de la infección. Por otro lado, los nucleoides en el proceso de maduración toman parte de la membrana vacuolar o citoplásmica y posteriormente son liberados de la célula. El ciclo de multiplicación viral se desarrolla en 7 u 8 horas en células de embrión de pollo con una producción máxima de virus por célula de 1500 a 3000 unidades formadoras de placa.


4. Subtipos del virus. Por medio de la prueba cinética de la inhibición de la hemaglutinación, Young y Johnson  clasificaron el virus de la EEV en subtipos. El subtipo IA corresponde a la cepa de Beck y Wickoff y la de burro de Venezuela y Trinidad. En el subtipo IB se encuentran cepas que ocurren en Perú, Ecuador y recientemente en Norte, Centro y Sudamérica, donde han provocado graves brotes de enfermedad. El subtipo IC existe en Venezuela y Colombia; el subtipo ID se encuentra en Colombia y Panamá y el subtipo IE en Centroamérica y México, donde se ha considerado como cepa enzoodémica. Por otra parte, el subtipo II se encuentra en Florida, Estados Unidos. El subtipo III, entre el que se encuentra la cepa Mucambo, se ha aislado en Brasil al igual que el subtipo IV o Pixuna. Con respecto a los caballos, Walton y Johnson han señalado que los subtipos IB y IC son más patógenos y provocan encefalitis en la mayoría de los casos, en comparación con los subtipos ID, IE, II, III y IV, los cuales causan una leve viremia acompañada de fiebre y ocasionalmente encefalitis. Existe protección cruzada en animales inmunizados con los diferentes subtipos. Sin embargo se han reportado fallas en la inmunidad conferida por un virus contra otro, indicando que los subtipos son similares pero no idénticos
Realmente no se trata de un virus único, sino de una serie de virus muy similares en sus reacciones serológicas pero diferentes en su comportamiento biológico, de tal forma que se agrupan en un complejo taxonómico, el complejo del virus de la encefalitis equina venezolana (EEV), el cual está formado hasta la fecha por 13 miembros, todos aislados únicamente en el continente americano (tabla 1).  El complejo de los EEV comenzó a perfilarse con cuatro subtipos iniciales , utilizando una prueba cinética de inhibición de la hemaglutinación. El subtipo I era el único que tenía un comportamiento biológico asociado con epizootias equinas y epidemias de encefalitis, por lo cual se conoce como epizoótico. Los subtipos Il-IV se aislaban solamente de mosquitos y de pequeños roedores silvestres y no eran capaces de producir epizootias ni epidemias por lo cual se llamaron enzoóticos. Posteriormente, se han identificado otros dos subtipos con diferentes variedades serológicas,dentro de los subtipos I y III. Actualmente hay evidencia de que las variedades A y B son idénticas y de que las variedades D, E y F, del subtipo I no causan epizootias (tabla 2).




Reservorio: Aves, roedores y caballos.5
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Mosquitos: Aedes spp. , Culex portesi, Psorophora ferox.5





La Encefalitis Equina Venezolana (EEV) se presenta con diferentes grados de severidad y puede causar alta morbilidad y letalidad en los équinos. Es una enfermedad que se presenta de manera cíclica y que puede producir epizootias y epidemias combinadas. El équido es amplificador del virus por lo que un elemento fundamental para prevenir el riesgo en los humanos es la prevención de la enfermedad en los équinos a través de la vacunación periódica.4
Dependiendo de la cepa del virus actuante, puede presentarse una severa enfermedad febril con síntomas neurológicos o no. Las formas de presentación van desde una presentación subclínica sin síntomas aparentes, moderada con inapetencia, fiebre y depresión, severa con los síntomas descritos y además síntomas nerviosos más notorios (incoordinación, espasmos musculares, ceguera, rechinar de dientes, caminar en círculos, cojeras, caídas o recumbencia, convulsiones),  hasta una presentación fatal con muerte.4

Periodo de incubación:

El período de incubación de la enfermedad va de dos a seis días y puede ser tan corto como de un solo día. Los casos humanos son infecciosos para los mosquitos durante 72 horas, pero la relevancia del humano como fuente de infección para otros humanos es muy poca. El período de incubación “extrinseca”, en el mosquito dura aproximadamente 1 semana.3

Modo de transmisión:

El virus se transmite por la picadura de un mosquito infectado. Hay muchas especies de mosquitos que pueden transmitir este virus lo que lo hace capaz de producir grandes cantidades de casos humanos y animales en poco tiempo (alto poder epidémico). Dentro de las especies capaces de transmitir el VEEV tenemos el Culex (Melaconion), Aedes, Mansonia, Psorophora, Haemagogus, Sabethes, Deinocerites y Anopheles. También es posible que algunas clases de jejenes puedan transmitir el virus. El Culex es la especie que mantiene la transmisión de los virus enzooticos en la naturaleza, mientras que los virus epizooticos son transmitidos por una amplia gama de mosquitos. Pese a su variedad todos los potenciales vectores no tienen la misma capacidad de ser infectados, asi por ejemplo el Aedes aegypti necesita 105 unidades formadoras de placas mientras que para Aedes taeniorhyncus se necesitan 107 unidades.3

Ciclo
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Imagen Nº1: ciclo del virus de la encefalitis equina venezolana. Fuente OMP y OPS

Existen dos ciclos de transmisión viral, denominados enzoótico y epizoótico. En el primero, los reseivorios del virus son pequeños roedores como Proechymis sp. y Oyzomis sp. dentro de los cuales el virus es transmitido por mosquitos del género Culex, subgénero Melanoconion (18); es propio de áreas húmedas, lluviosas y selváticas. Estos virus no son pató- genos para los equinos y pueden causar enfermedad humana en personas que se introduzcan en este hábitat, enfermedad que en general es aguda, febril y benigna. Se discute si mutaciones de este virus pueden originar las cepas patógenas propias del ciclo epizoótico. La evidencia epidemiológica, incluyendo la epidemiología molecular, sugiere que no es así (16, 19). En el ciclo epizoótico se afectan los equinos con gravedad variable según el tipo de virus y lavacunación previa. Las transmisores son numerosos mosquitos tales como Psorophora confinnis, Mansonia sp., Aedes scutelaris, Aedes serratus, Aedes taeniorhynchus, Anopheles aquasalky varios más. 
Signos clínicos

El virus de la EEV ataca a seres humanos de todas las edades, sin embargo, se ha observado que en ocasiones los individuos menores de 15 años de edad han sido los más afectados. El periodo de incubación es aproximadamente de 1.5 a 3.5 días. El cuadro clínico semeja una infección de las vías respiratorias altas con fiebre de hasta 40.5°C., dolor tanto de cabeza como en la parte posterior de los ojos, catarro nasal, dolores musculares y en algunos casos vómito. Los síntomas duran de 3 a 6 días y posteriormente hay recuperación. Algunos pacientes muestran síntomas neurológicos tales como rigidez nucal, convulsiones, nistagmus, desviación de los ojos y en ocasiones sobreviene la muerte. Los caballos, 24 horas después de la inoculación, presentan fiebre que puede permanecer hasta 7 días. También hay disminución del consumo de pastura y agua y en ocasiones depresión del sistema nervioso central (SNC). En la sangre hay leucopenia con reducción de neutrófilos y linfocitos, durante 3 a 5 días. No existen cambios aparentes en el número de monocitos, eosínófílos y basófilos. Al mismo tiempo ocurre un descenso del valor del hematocrito y del número de plaquetas. Por otra parte, en animales inoculados experimentalmente se ha observado que la viremia es alta y dura un promedio de 120 horas. El virus puede ser aislado de las secreciones nasales, oculares y de la boca, así como de la orina y leche. La recuperación de los caballos en ocasiones es lenta, o puede continuar con signos clínicos. Entre éstos se encuentra la depresión o excitabilidad, el caminar en círculos o apoyar la cabeza en las paredes, así como presentar pérdida del balance, movimientos masticatorios, flacidez de los labios, los ojos semicerrados, nistagmus o las orejas caídas .
En la necropsia de los animales hay congestión y equimosis de las membranas mucosas y superficies serosas. Ocasionalmente se presentan hemorragias en los ganglios linfáticos, palidez del hígado, el cual se rompe con facilidad; edema y congestión de las meninges, así como palidez de la médula ósea.

Las lesiones microscópicas de los órganos son variables. En el SNC, las lesiones se encuentran generalizadas; éstas consisten en hiperemia e infiltración perivascular variable y áreas de necrosis licuefactiva; las alteraciones aparecen con más frecuencia en el área frontal de la corteza disminuyendo hacia el área occipital. Las meninges presentan inflamación difusa con exudado celular compuesto principalmente de linfocitos. En la médula espinal hay gliosis focal o difusa con infiltración de neutrófilos e infiltración perivascular principalmente por linfocitos. El sistema reticuloendotelial presenta depleción del tejido hematopoyético, tanto en la médula ósea en la que hay disminución de elementos maduros, como en el bazo y ganglios linfáticos en los cuales pueden llegar a quedar sólo remanentes de folículos linfáticos. En el páncreas hay focos necróticos en las células de los acini. El hígado presenta degeneración albuminosa y ocasionalmente aparecen focos de tejido hematopoyético probablemente para compensar la actividad de la médula ósea. En los riñones hay necrosis de los tubos contorneados proximales y degeneración albuminosa.

Letalidad: 

Se han registrado 11 390 casos febriles en personas compatibles con encefalitis equina venezolana y 16 muertes. La enfermedad se ha confirmado en 185 personas mediante el aislamiento del virus o la prueba de hemaglutinación-inhibición. También se han notificado cerca de 500 casos clínicos en équidos y la muerte de 475 animales, incluyendo caballos, mulas y burros.3
Entre 1962 y 1973 se produjeron brotes todos los años excepto en 1965. La mayor epizootia y epidemia, que fue causada por la variante B del subtipo I, se inició en Colombia en 1967 y se extendió a Ecuador, Venezuela, América Central, México y, finalmente, alcanzó el estado de Texas en 1971. Durante esta epizootia, fallecieron de 38 000 a 50 000 équidos. En Ecuador se notificaron cerca de 31 000 casos y 310 óbitos en personas, y en Colombia, 200 000 casos.3
La mayor parte de los fallecimientos ocurre en niños menores de cinco años. La autopsia revela cambios macroscópicos e histológicos semejantes a los observados en encefalitis causada por otros arbovirus, pero además, se encuentran hemorragias focales macroscópicas diseminadas en el cerebro, corazón y pulmones.

Tratamiento: 

No hay tratamiento antiviral específico, las medidas de atención primaria incluyen reposo absoluto, hidratación adecuada y terapia sintomática.3 Aunque existe una vacuna para equinos basada en la cepa TC83 y que se encuentra disponible comercialmente. Coberturas de más 80% en los equinos de las zonas expuestas prácticamente garantizan la no ocurrencia de brotes o epidemias de la enfermedad. Para humanos hay una vacuna de virus vivos atenuados que se usa solo para el personal de salud que puede estar expuesto en el laboratorio a aerosoles que contengan el virus. También se ha recomendado su uso en personas que por su oficio estén expuestos a un riesgo aumentado de infección.2
El control de las epidemias se basa en la vacunación masiva de equinos y el control de la población de vectores. Esto último se logra por aspersión peridomiciliaria de insecticidas y por el control de criaderos extradomiciliarios con medios químicos o biológicos. Hasta hace muy poco no estaba clara la razón que motivaba la aparición de las epidemias y epizootias y se habían propuesto al menos tres teorías que eran: 3
1) Mutación de las cepas del virus de la EEV, ya que existen focos silenciosos silvestres en varias partes de las Américas.
2) Liberación de las cepas epizooticas de sus propios ciclos enzooticos, por varias razones: acumulación de susceptibles, aumento de las poblaciones de vectores y de reservorios.
3) Mutación ocurrida alrededor de 1930, que hizo aparecer la primera cepa epizootica de VEEV, la cual es reintroducida periódicamente a los grupos de susceptibles, por la vacunación de equinos, con vacunas inactivadas parcialmente.


Epidemiología

Los ciclos enzoóticos del virus de la EEV han sido estudiados en Trinidad, Colombia, Panamá, Brasil, México y Estados Unidos (Florida). La actividad del virus fue siempre focal, localizada a marismas o pantanos sombreados, de agua dulce, o extensiones de agua de movimiento lento, donde eran comunes las plantas acuáticas flotantes. Durante algún tiempo se penseque tales focos enzoóticos eran las fuentes de los brotes periódicos de encefalitis equina humana venezolana que arrasaban grandes regiones de Venezuela, Colombia, Ecuador y Perú, pero el análisis antigénico de cepas de virus en todos los países en que había EEV junto con estudios experimentales en caballos, han revelado que los virus enzoóticos de la EEV nunca estuvieron implicados en epizootias.

A diferencia de los virus relacionados de la encefalitis equina occidental y de la encefalitis equina oriental, el caballo es el huésped principal, particular causante de la amplificación y de la diseminación de las cepas de EEV clásicas. No se ha descubierto mecanismo alguno para explicar el mantenimiento interepizoótico de tales virus en la naturaleza.

Las epizootias de EEV típicamente tienen lugar en regiones tropicales rurales caracterizadas por climas en los que hay una estación seca. La cría de ganado es la costumbre campesina dominante y los brotes ocurren más a menudo después de la llegada de la época de lluvias. A veces casi todos los equinos y grandes porciones de las poblaciones humanas rurales son infectados durante tales brotes. Muchos miles de infecciones humanas, la mayor parte de ellas clínicamente aparentes, pueden ocurrir en unas cuantas semanas.

Todos los subtipos de virus de la EEV son muy infecciosos para humanos y otros vertebrados, cuando se adquieren por las vías respiratorias, por consiguiente, se han encontrado muchas infecciones en el laboratorio.
Resultado de imagen para encefalitis equina venezolana PREVENCION
DIAGNOSTICO

El diagnóstico presuntivo se hace con base en las características clínicas (fiebre, cefalea intensa y convulsiones), asociación epidemiológica (presencia de muerte de equinos). El diagnóstico definitivo se confirma por aislamiento viral, aumento del título de anticuerpos o detección de lgM específica.3

Diagnostico virológico: Aislamiento  viral o RT-PCR en tejidos, sangre o líquido cefalorraquídeo (LCR).5
El VEE con frecuencia se puede recuperar de la sangre durante el estadio temprano y febril de la enfermedad, pero los animales con signos neurológicos generalmente no son virémicos. Este virus a veces se aísla del cerebro en la necropsia; sin embargo, si la enfermedad es prolongada, puede desaparecer del SNC antes de la muerte. En ocasiones, el VEEV también se encuentra en el páncreas u otros tejidos. Los virus de la EEV se pueden aislar en conejos de Indias, hámsters, ratones, huevos de pollo embrionados o linajes celulares que incluyen Vero, RK– 13, BHK–21 y fibroblastos embrionarios de patos o pollos. Estos virus se pueden identificar mediante la fijación de complemento, inhibición de la hemaglutinación, neutralización del virus o ensayos de inmufluorescencia. Los subtipos se pueden caracterizar por inmunofluorescencia, neutralización diferencial del virus (PRN) o secuencia del ácido nucléico.1
Diagnostico serológico: Determinación de IgM o de IgG  durante fase aguda (1 a 7 días después de la aparición de síntomas) y en la fase de convalecencia (14 días después de iniciados los signos), usando ELISA, técnica de inhibición de la hemoaglutinación, neutralización o similares.5
Para el aislamiento se pueden inocular muestras de sangre o de lavado nasofaringeo recolectadas en las primeras 72 horas de enfermedad en cultivos celulares o en ratones recién nacidos. Los sueros pareados de pacientes convalecientes con 10 días de diferencia deben mostrar un aumento de los anticuerpos superiores a tres diluciones.2 Las pruebas serológicas incluyen neutralización del virus, fijación del complemento, inhibición de hemaglutinación y ELISA. El diagnóstico definitivo requiere que se cuadrupliquen los títulos pareados. Debido a que los anticuerpos se desarrollan de forma temprana en esta enfermedad, es posible que no se cuadrupliquen en los caballos con encefalitis. En este caso, las muestras pareadas tomadas de animales febriles de la manada pueden ser útiles. En caballos que no se vacunaron recientemente con un virus activo, la presencia de IgM específica en la prueba de ELISA también sugiere exposición.  Es posible que algunos animales infectados con el VEEV epizoóticos presenten anticuerpos preexistentes para las variantes enzoóticas de la EEV.1

La prueba de seroneutralización (SN) es bastante específica y se puede efectuar tanto en ratón lactante como en cultivos celulares. En estos últimos se toma en cuenta la inhibición del efecto citopatogénico y la neutralización o reducción de placas. También se ha adaptado la prueba de SN al sistema de microplaca lo que ha permitido trabajar un mayor número de sueros y en una forma más económica. Por otro lado, la prueba de inhibición de la hemaglutinación (IH) también es bastante sensible. Debido a la facilidad con que se puede efectuar y su economía, esta prueba es una de las más útiles en serología, sin embargo pueden ocurrir reacciones cruzadas con otros virus del grupo A . Con respecto a la prueba de fijación del complemento (FC) ésta es de valor limitado ya que además de ser complicada en su elaboración, se ha reportado que en ocasiones sólo un pequeño porcentaje de sueros con anticuerpos N e IH reaccionan en forma positiva, con títulos bajos a la prueba de FC. Sin embargo, la presencia de anticuerpos FC en el suero es evidencia de actividad viral reciente y este dato es de valor en las encuestas serológicas. 
Otras pruebas de laboratorio que se han utilizado en menor escala para demostrar la presencia de anticuerpos en un suero o de antígeno viral han sido la precipitación radial en agar, inmunoelectroforesis, precipitación en geles de agar e inmunofluorescencia.

Varias encuestas serológicas para EEV se han llevado a cabo en los últimos años, aunque solo se han probado números limitados de sueros de un pequeño número de países. Los resultados hasta la fecha sugieren que EEV es endémico en équidos en la mayor parte de Sudáfrica, Botswana, Namibia, Zimbabwe y Kenia  Recientemente EEV ha sido aislado de un brote en Israel (comunicación personal, 2010); EEV fue diagnosticado utilizando una nueva matriz de ADN con posterior RT-PCR y análisis de secuencia. La detección de EEV fuera de África resalta el riesgo de su propagación a otras áreas donde los vectores competentes y los animales susceptibles están presentes.

Tradicionalmente, la fijación del complemento y las pruebas de inmunodifusión en gel de agar se han utilizado para la detección de anticuerpos específicos para el grupo de EEV. La interpretación de la prueba de fijación del complemento puede ser subjetiva y los efectos anti-complementarios que ocurren con los sueros de cebra y burro pueden afectar seriamente la confiabilidad y eficiencia de la prueba. La prueba de inmunodifusión en gel de agar utiliza un antígeno derivado de células concentradas, que puede reaccionar con anticuerpos contra proteínas celulares presentes en algunos animales vacunados previamente con vacunas que contienen antígenos producidos en cultivos celulares, por ejemplo, vacunas contra la gripe equina y AHS. También existen preocupaciones acerca de la falta de sensibilidad de la prueba de inmunodifusión en gel de agar, que depende de la concentración de anticuerpo presente en el suero de prueba. La prueba de neutralización del virus también se ha utilizado para la detección de anticuerpos contra EEV, sin embargo, debido a que es serotipo específico y requiere células de cultivo de tejidos y virus vivos para cada serotipo, es laborioso y lleva mucho tiempo llevarlo a cabo.
 Se ha descrito previamente un ensayo de inmunoabsorción ligado a enzimas indirecto (ELISA) específico de grupo para la detección del anticuerpo EEV. Este ensayo utiliza un conjugado anti-caballo. Como la capacidad de unión de este conjugado a burro, mula y anticuerpo cebra no se conoce; el ensayo solo puede usarse con confianza para sueros de caballos.
 Según unos estudios realizados por Crafford J y demás compañeros publicado en el 2011 en la revista de métodos virológico.  Ellos llevaron a cabo el desarrollo y la validación de un ELISA de competición (C-ELISA) para la detección de anticuerpos EEV en équidos que, cuando se utiliza junto con ELISA de AHSV, diferenciarán serológicamente entre estas dos infecciones.  Para la ejecución del estudio emplearon  un ELISA competitivo, basado en anticuerpos policlonales, específico de grupo (C-ELISA) para la detección de anticuerpos contra el virus de la encefalopatía equina (EEV). El ensayo mide la competencia entre un antisuero de cobaya específico y un suero de prueba, para un antígeno EEV pre-titulado. El C-ELISA detectó anticuerpos contra los siete serotipos de EEV conocidos. Los antisueros de referencia producidos contra otros arbovirus no reaccionaron de forma cruzada con el antígeno EEV. Se usaron sueros negativos de caballos en el Reino Unido para establecer la línea de base para una población negativa. Las poblaciones negativas y positivas de caballos sudafricanos, seleccionados sobre la base de la neutralización del virus se analizaron posteriormente. Parámetros de prueba óptimos, donde sensibilidad    especificidad  100%, se calcularon mediante análisis característico del operador receptor de dos gráficos (TG-ROC) para que estuvieran en un valor de corte de 29.5% de inhibición. Los resultados muestran que el EEV C-ELISA se describe como sensible, específico y confiable. Utilizado junto con los ELISA disponibles para el virus de la peste equina africana (AHSV), se puede lograr un diagnóstico serológico diferencial entre EEV y AHSV.

Vacuna

Se han utilizado diferentes tipos de vacunas en humanos y animales para prevenir el mal. Sin embargo han surgido diferentes problemas, como eficacia limitada y efectos adversos frecuentes. Por ello se están investigando nuevas vacunas más eficaces y seguras. 

- Vacuna para la inmunización activa de equinos, mulares y asnales sanos contra la Encefalitis Equina Venezolana o “Peste Loca” de los caballos. Liofilizada conteniendo virus atenuado de la Encefalomielitis Equina Venezolana (Cepa TC83). Induce inmunidad por 2 años. Dosis y vía de administración: Aplicar exclusivamente a équidos 2 ml por vía subcutánea en la tabla del cuello ó en la región retro o preescapular. Esta vacuna no debe aplicarse en equinos menores de 2 semanas de edad y hembras preñadas. 


BIBLIOGRAFIA
1.   
  1. CFSPH.iastate.edu. Encefalomielitis equina: del este, del oeste y venezolana [sede web]. Estado de lowa: the Center for Food Security y Public Healt; 2008 [actualizado abril del 2010, citado el 2 de diciembre del 2017]. Disponible en: http://www.cfsph.iastate.edu/Factsheets/es/equine_encephalitides-es.pdf
  2. Crafford JE, Guthrie AJ, Van Vuuren M, Mertens PPC, Burroughs JN, Howell PG, et al. A competitive ELISA for the detection of group-specific antibody to equine encephalosis virus. J Virol Methods [Internet]. 1 de junio de 2011 [citado 12 de diciembre de 2017];174(1-2):60-4. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0166093411001157
  3.    Fischer EAJ, Martínez López EP, De Vos CJ, Faverjon C. Quantitative analysis of the probability of introducing equine encephalosis virus (EEV) into The Netherlands. Prev Vet Med [Internet]. 1 de septiembre de 2016 [citado 2 de diciembre de 2017];131:48-59. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S016758771630193
  4.  Fernando De La Hoz Restrepo. Encefalitis equina Venezolana. MVZ-CORDOBA. 2000; 5:(1), 18-22. Disponible en: file:///C:/Users/Angelica/Downloads/DialnetEncefalitisEquinaVenezolana-3297475.pdf
  5.  Ica.gov.co. Informe especial: Encefalitis Equina Venezolana [sede web].Bogotá, Colombia: ICA comunica; 2013 [actualizado el 20 de septiembre del 2017, citado el 2 de diciembre del 2017]. Disponible en: https://www.ica.gov.co/Periodico-Virtual/Prensa/Informe-especial-Encefalitis-Equina-Venezolana.asp
  6. OMS y OPS. Encefalitis Equina Venezolana [sede web]. Disponible en: http://www.paho.org/hq/index.php?option=com_content&view=article&id=8300%3A2013-encefalitis-equina-venezolana&catid=908%3Aviral-diseases-home&Itemid=39851&lang=es 

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